La iniciativa revelada esta semana por el jefe del Departamento de Viviendas Públicas, Ben Carson, propone aumentar la renta de inquilinos subsidiados por el gobierno del actual 30% por ciento al 35% por ciento de sus ingresos.
“No es justo, y menos en una comunidad como en Chelsea donde las personas ganan apenas para sobrevivir” dice Erick Deblas, coordinador de inquilinos de colaborativa de Chelsea.
Erick Deblas ayuda a decenas de familias en Chelsea con problemas de pagos de alquiler, desalojo y programas de subsidios. Él afirma que esta propuesta de ley no es la solución para la crisis de viviendas que se vive en el país.
Según el departamento de viviendas públicas, el costo de subsidios aumenta cada año para el gobierno y ni siquiera alcanza para ayudar a todos los necesitados. Ellos estiman que 1 de cada 4 familias reciben ayuda del gobierno, el resto se queda en una larga lista de espera.
Por eso, ellos quieren disminuir las deducciones de impuestos federales por gastos médicos y cuidado de menores ya que lo ven como una ventaja injusta.
