Las imágenes de los días 6 y 7 de febrero de 1978 en Boston y el resto de Massachusetts aún permanecen intactas en la memoria de muchos. Los bancos de nieve eran enormes, y Mike Dukakis, el entonces gobernador de Massachusetts, apareció ante las cámaras para declarar un estado de emergencia por la tormenta que trajo 27 pulgadas de nieve a Boston, además de intensos vientos de 83 millas por hora: hasta ese momento, la nevada más alta registrada en la ciudad.
A 45 años de la fatídica tormenta de invierno que dejó decenas de pulgadas de nieve alrededor de Nueva Inglaterra, aun el recuerdo está vívido ante lo que fue un sistema atmosférico que hoy día se utiliza, incluso, para medir todos los que atraviesan Boston y Massachusetts, desde entonces.
Para muchas comunidades de la zona, la tormenta fue mortal. La tormenta dejó 99 personas muertas, destruyó casas a lo largo de la costa y dejó a muchas otras varadas, de acuerdo con datos históricos hallados de esa época.
Fotos impresionantes del humo marino causado por el frío extremo en Nueva Inglaterra
La Guardia Nacional atravesó amplias carreteras para despejar casas y autos varados, y tomó varios días para que las comunidades pudieran regresar a la normalidad. La noticia de que una gran tormenta de nieve llegaría a Massachusetts se había dado, pero nadie estaba preparado para lo grande que sería.
"Creo que todos pensamos: 'Vivimos en Nueva Inglaterra, es una tormenta, lo enfrentaremos de una forma u otra', pero fue un poco más de lo que esperábamos", dijo el exjefe de bomberos de Northbridge, Cornelius Madigan, a NECN hace varios años.
