En respuesta al fallo de la Corte Suprema de EE. UU. que anuló Roe v. Wade, el gobernador de Massachusetts, Charlie Baker, firmó una orden ejecutiva el viernes para proteger el acceso a los servicios de atención de la salud reproductiva en la Commonwealth.
Esto es lo que decía su orden:
“Estoy profundamente decepcionado por la decisión de hoy de la Corte Suprema, que tendrá importantes consecuencias para las mujeres de todo el país que viven en estados con acceso limitado a los servicios de salud reproductiva. El estado ha sido líder durante mucho tiempo en la protección del derecho de la mujer a elegir y acceder a los servicios de salud reproductiva, mientras que otros estados han criminalizado o restringido el acceso”, dijo Baker en un comunicado. “Esta orden ejecutiva preservará aún más ese derecho y protegerá a los proveedores de atención de la salud reproductiva que atienden a residentes fuera del estado. A la luz del fallo de la Corte Suprema que anuló Roe v Wade, es especialmente importante garantizar que los proveedores de Massachusetts puedan continuar brindando servicios de atención de salud reproductiva sin preocuparse de que las leyes de otros estados puedan usarse para interferir con esos servicios o sancionarlos por proporcionar servicios que son legales en el estado”.
“Estamos orgullosos de la historia del estado de garantizar el acceso a la atención de la salud reproductiva, y continuaremos haciéndolo, a pesar del fallo de hoy de la Corte Suprema”, agregó la vicegobernadora Karyn Polito. “Con estas acciones, Massachusetts vuelve a liderar el camino en la protección del derecho de la mujer a elegir”.
La orden ejecutiva protegería a los proveedores que brindan estos servicios a personas de fuera del estado, así como a personas de fuera del estado que buscan servicios que son legales en Massachusetts. También prohíbe que las agencias del Departamento Ejecutivo ayuden en la investigación de otro estado sobre una persona o entidad por recibir o brindar servicios de salud reproductiva que son legales en Massachusetts.
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La orden protege a los proveedores de Massachusetts que brindan servicios de salud reproductiva de perder sus licencias profesionales o recibir otra disciplina profesional basada en posibles cargos fuera del estado.
Según la orden ejecutiva, el Commonwealth no cooperará con solicitudes de extradición de otros estados que presenten cargos penales contra personas que recibieron, ayudaron o prestaron servicios de salud reproductiva que son legales en Massachusetts.
