Cerca de 100 vuelos se cancelaron en el Aeropuerto Internacional Logan de Boston el viernes por la mañana y más de 50 vuelos se retrasaron debido al clima en otras partes del país.
Las cancelaciones y los retrasos del viernes por la mañana se producen después de que se informaran cientos de interrupciones más en el horario de vuelos el jueves.
La portavoz de Massport, Jennifer Mehigan, dijo que el clima en otros aeropuertos, especialmente a lo largo de la costa este, era el culpable de los retrasos y señaló que este tipo de problemas son comunes durante la temporada de tormentas de verano.
Se espera que las tormentas eléctricas previstas para el viernes por la tarde en partes de Massachusetts se sumen a los retrasos actuales.
Algunos viajeros frustrados recurrieron a las redes sociales para informar que habían estado esperando durante horas en los mostradores de boletos e incluso en su avión.
"Estuvimos en la pista durante al menos tres horas", dijo una mujer a NBC10 Boston en el aeropuerto Logan.
"Todos estamos tratando de encontrar vuelos, y parece que están agotados o tienen vuelos terribles para mañana", dijo otro.
Las aerolíneas y los expertos en viajes han advertido que la temporada de viajes de verano podría ser caótica, con problemas como escasez de pilotos, lo que significa que hay menos vuelos disponibles y los retrasos por el clima son inevitables.
Varias de las principales aerolíneas culparon directamente a los controladores de tráfico aéreo y se disculparon con los pasajeros varados en la pista durante horas.
Con el U.S. Open y las Finales de la NBA en la ciudad llenando los hoteles, los viajeros varados se vieron obligados a dormir en catres, sillas o en el suelo.
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"No hay hoteles. Conseguí un Uber y costaba como 80 dólares simplemente dando vueltas tratando de encontrar un hotel", dijo Vanessa Bagley de Belfast, Maine.
Pero esa era la menor de sus preocupaciones. Le cancelaron dos vuelos tratando desesperadamente de llegar a Texas.
"Seguían cancelando. Mi hermana se va a casar y la recepción es mañana y no vamos a llegar", dijo.
Ahora todo lo que puede hacer es unirse a esta fila aparentemente interminable de compañeros de viaje que intentan volver a reservar en persona y por teléfono, con poca ayuda a la vista.
Gran parte de la frustración de los viajeros se debe a la falta de información.
"Es una espera de llamada de 6 horas", dijo Jaina Aikens, que viaja a su casa en Florida, "y luego, cuando llegué aquí, me dijeron: 'Esta es solo la línea para las cancelaciones, así que únanse. '"
