Casi 1,600 empleados del estado de Massachusetts no habían probado que estaban vacunados contra el coronavirus o habían buscado una exención de vacuna antes de la fecha límite del domingo, anunció el lunes la administración del gobernador Charlie Baker.
El gobernador republicano dijo en agosto que se requeriría que un total de 44,000 trabajadores y contratistas del poder ejecutivo se vacunen contra COVID-19 o enfrentarán la suspensión y, en última instancia, la pérdida de sus trabajos. El mandato no incluye la opción de realizar pruebas periódicas para las personas que no quieren vacunarse.
"La administración Baker-Polito celebra que más del 95% de los empleados activos en la rama ejecutiva hayan completado el formulario de atestación requerido o hayan solicitado una exención y cumplan con la orden ejecutiva del gobernador Baker", dijo la administración en un comunicado. "En los próximos días, la administración trabajará con una pequeña cantidad de empleados, que no cumplen, e implementará una disciplina progresiva si es necesario".
El gobierno no espera experimentar ninguna escasez de personal, según el comunicado.
La administración no dijo en qué departamentos trabajaban los empleados no vacunados, pero los sindicatos que representan a los policías estatales y los guardias de prisiones estatales habían desafiado el mandato en los tribunales.
