La Black COVID-19 Coalition de Boston está expresando su indignación por una gran fiesta de dos días que se llevó a cabo el fin de semana pasado en el vecindario de Dorchester de la ciudad, diciendo que el gobernador Charlie Baker, el alcalde Marty Walsh y otros políticos no han dicho ni hecho nada sobre lo que podría terminar siendo próximo evento "super esparcidor" de coronavirus en el estado.
El grupo, formado por líderes de la comunidad negra, realizará una conferencia de prensa a la 1 p.m. del jueves para discutir la fiesta celebrada el 28 y 29 de agosto, a la que dijeron que asistieron miles de personas. Planean exigir acciones que incluyan pruebas y rastreo de los que asistieron y pasos para evitar una repetición durante el fin de semana del Día del Trabajo.
La coalición dijo que se instalaron mesas de DJ y camiones de plataforma en Talbot Avenue.
“Vi una reunión cerca de Franklin Park el viernes por la noche de varios cientos de personas y me preocupó especialmente que [la policía de Boston] no parecía preocuparse por disolver el evento”, dijo Louis Elisa, residente de mucho tiempo y miembro de la coalición, en un comunicado.
La exsenadora estatal Dianne Wilkerson, otro miembro de la coalición, dijo que los funcionarios electos y la policía habían sido alertados días antes de que estaba ocurriendo el evento, pero no hicieron nada.
Los miembros del grupo dijeron que la falta de respuesta estaba en marcado contraste con los eventos celebrados en comunidades como Chatham y Cohasset que provocaron fuertes reprimendas de Baker y se preguntaron si eso se debe a que muchos de los asistentes a la fiesta de Dorchester eran negros o latinos.
