BOSTON

Diecinueve miembros de violenta pandilla de Dorchester enfrentan múltiples cargos

Diecinueve miembros y asociados de la pandilla Cameron Street, una organización criminal violenta con sede en Dorchester, han sido acusados ​​de 39 cargos, anunció la oficina de la Fiscalía General de Massachusetts.

Según la acusación, los acusados están involucrados en actividades delictivas que incluyen asesinato, asalto con intención de asesinar, robo a mano armada, robo de auto, allanamiento de morada, así como drogas y armas de fuego, y operaban en el vecindario Dorchester de Boston y sus alrededores.

La actividad delictiva de la pandilla se ha extendido a otras comunidades como Cambridge, Somerville, Quincy, Everett, Randolph, Taunton y otras partes de Massachusetts, según la investigación.

Durante la investigación, supuestamente se incautaron 21 armas de fuego y cientos de municiones a 11 de los acusados.

“Los miembros y asociados de la pandilla Cameron Street, durante años, supuestamente han plagado a Boston, Brockton y las comunidades vecinas con delitos graves y violentos a través de la confluencia de armas, drogas y daños. Los residentes respetuosos de la ley de Dorchester, Brockton y otras comunidades afectadas merecen vivir, trabajar y prosperar libres de miedo y trauma”, dijo la fiscal federal Rachael S. Rollins. “Con estos cargos y los arrestos de hoy, nuestro objetivo es devolver la paz y la seguridad a estos vecindarios. Este es otro ejemplo más de las sólidas asociaciones entre las agencias policiales federales, estatales y locales y nuestra continua dedicación compartida para erradicar la violencia y quitar las armas ilegales de nuestras calles. Mi oficina no escatimará recursos para garantizar la seguridad de todos los residentes de Massachusetts, responsabilizar a los delincuentes violentos y recuperar y restaurar nuestras comunidades”.

Los miembros y asociados de la pandilla fueron identificados como: Kenny Romero, a/k/a “KG”, 28; Anthony Centeio, alias “Wheezy”, alias “Taliban Wheeze”, de 33 años; Felisberto Lopes, alias “Phil”, alias “CheeB”, 36; Keiarri Dyette, alias “Kemo”, de 24 años;
Eric Correia, alias “Bubba”, de 24 años;Paulo Santos, alias “Bucky”, 33; Devante Lopes, a/k/a “D-Lopes”, 27; Charod Taylor, alias “Pachino”, de 33 años; José Afonseca, alias “Zay”, de 30 años;James Rodrigues, alias “Bummy”, de 32 años; Jonathan Darosa, alias “Jeezy”, de 29 años; Clayton Rodrigues, alias “Loo”, alias “C-Loo”, 26; Wilter Rodrigues, alias “Walt”, alias “Wo-Wo”, de 35 años; Michael Lopes, alias “Meech”, de 34 años; Víctor Núñez, alias “Tito”, de 41 años; Fnu Lnu, alias “Smoke”; Jamaal Davis, alias “Marley”, de 29 años; Michael Nguyen, a/k/a “Asian”, de 22 años; y Steve Depina, alias “Stizz”, de 35 años.

¿CÓMO OPERABA LA PANDILLA CAMERON STREET?

Los miembros de Cameron Street usan la violencia contra las pandillas rivales y los testigos, generalmente con el uso de armas de fuego, para mantener y mejorar su estatus y reputación, así como para proteger el poder, la reputación y el territorio de la pandilla.

Los miembros de Cameron Street son presuntamente responsables de ayudarse entre sí para obtener y acceder a armas de fuego, formar y mantener conexiones con el narcotráfico, resolver disputas territoriales con pandillas rivales y brindar refugio seguro a sus compañeros buscados por las fuerzas del orden.

Además, se alega que los pandilleros de Cameron Street publicaban regularmente videos o usaban las redes sociales para promover Cameron Street, denigrar a los rivales de las pandillas y celebrar asesinatos y otros delitos violentos cometidos por la pandilla. Para identificarse como miembros de la pandilla, los miembros de Cameron Street se hacían tatuajes, usaban señas con las manos, y joyas y ropa con las letras "C", "A" y "M" o números correspondientes a los lugares de las letras en el alfabeto. “3-1-1-3”.

Según la acusación formal, los miembros de Cameron Street participan en actividades de tráfico de drogas y distribuyen cocaína, base de cocaína (cocaína crack), oxicodona y marihuana en todo Massachusetts. Se alega que durante la investigación se decomisó más de un kilogramo de cocaína a pandilleros.

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