Una filtración de datos en la agencia estatal que opera el servicio de autobús público de Rhode Island comprometió la información personal de unas 22 000 personas, dijeron funcionarios de la agencia en una audiencia legislativa.
La Autoridad de Transporte Público de Rhode Island compartió documentos en una audiencia del comité de supervisión del Senado el lunes por la noche que revelaron que, de los afectados, 5000 eran empleados de RIPTA y algunos de los 17 000 adicionales eran empleados de otras agencias estatales.
RIPTA envió cartas en diciembre a las 22.000 personas, dijo la agencia el martes.
La agencia dijo entonces que se había obtenido acceso no autorizado a algunos de sus sistemas informáticos y que la información privada, incluidos los números de seguridad social y los números de identificación de Medicare, se había visto comprometidos.
La violación sigue bajo investigación, tanto internamente como por parte del fiscal general del estado.
"En este momento, no creemos que nadie haya hecho nada malo de nuestra parte, pero todavía estamos investigando", testificó en la audiencia el asesor legal jefe de RIPTA, Steven Colantuono.
El director de RIPTA, Scott Avedisian, hablando públicamente por primera vez sobre la filtración, dijo que gran parte de la información comprometida estaba contenida en documentos del antiguo administrador del plan de salud del estado, almacenados en servidores RIPTA sin cifrar.
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Se programó que funcionarios del administrador testificaran en la audiencia, pero no lo hicieron.
Patrick Crowley, secretario-tesorero de la AFL-CIO de Rhode Island, dijo que algunos miembros del sindicato afectados por la filtración ya han informado que sus datos personales han sido mal utilizados.
RIPTA, en su declaración del martes, dijo que desde entonces ha impulsado la ciberseguridad "al mejorar aún más nuestros protocolos de seguridad, las prácticas de manejo de documentos y la capacitación en ciberseguridad para nuestros empleados".
