La fiscal general de Massachusetts, Maura Healey, anunció el martes que su oficina inició una investigación sobre el robo de datos de T-Mobile para determinar si la compañía tenía las medidas de seguridad adecuadas para proteger la información del consumidor y del dispositivo móvil.
Healey también insta a los consumidores que son clientes actuales o anteriores de T-Mobile a tomar medidas para protegerse contra el robo de identidad o el fraude.
T-Mobile reveló que en el ciberataque del que fue víctima recientemente fueron sustraidos datos de unos 40 millones de personas, entre clientes actuales y potenciales.
En un comunicado, T-Mobile explicó que está investigando el acceso "no autorizado" a sus sistemas que fue divulgado este fin de semana piratas informáticos en un foro de internet, y confirmó que los datos robados incluyen "información personal" pero no financiera.
"Nuestro análisis preliminar es que la información de aproximadamente 7.8 millones de cuentas de clientes de T-Mobile parece estar contenida en los archivos robados, así como unos 40 millones de registros de clientes antiguos o potenciales que habían aplicado previamente para un crédito con T-Mobile", dijo la firma.
El ciberataque también ha "expuesto" los nombres, números de teléfono y códigos PIN de 850,000 clientes de prepago en activo, por lo que la compañía ha reseteado esas contraseñas y recomendado al resto de clientes que modifiquen las suyas por precaución.