Aunque muchas de las festividades tradicionales de Halloween de Salem ya han sido canceladas este año, la gente todavía viaja a la ciudad para caminar por las calles, comer algo y pedir dulces. Pero en medio de la pandemia de coronavirus, la ciudad ha implementado restricciones de seguridad para que los visitantes las tengan en cuenta.
Las tiendas, los restaurantes y las atracciones siguen funcionando a una capacidad reducida (25% en el interior) y algunos espacios de estacionamiento se han reutilizado para albergar espacios para comer al aire libre. Aunque las regulaciones estatales permiten 10 personas por mesa en los restaurantes, Salem ha mantenido el límite local a seis.
En el centro de la ciudad existe una orden de máscara obligatoria y los infractores pueden enfrentar multas de hasta $300.
Los artistas callejeros deben mantenerse a 25 pies de distancia de su audiencia y no pueden hacer que los grupos se reúnan a su alrededor. El objetivo es crear un área separada para los artistas donde la gente pueda caminar y mirar desde la distancia.
Se requieren boletos y reservas anticipadas para ciertas atracciones y no se permitirán largas filas fuera de los negocios. La policía de Salem está preparada para cerrar las calles si es necesario.
Una herramienta en línea que muestra los niveles aproximados de público está disponible en el sitio web de la ciudad. El cálculo se basa en el número de vehículos y personas en las estaciones de trenes de cercanías.
Se anima a las personas a utilizar el transporte público debido al estacionamiento limitado.
