Refuerzos de la vacuna

Los efectos secundarios de las vacunas de refuerzo contra el COVID-19

Las personas han informado efectos secundarios como escalofríos, fiebre y náuseas después de recibir la vacuna COVID-19, pero ¿debe preocuparse por desarrollar tales síntomas después de recibir una vacuna de refuerzo?

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, los síntomas del refuerzo parecen reflejar en gran medida cómo se sintieron las personas después de su segunda dosis.

Los efectos secundarios se consideraron en su mayoría leves o moderados, y el dolor en el brazo, la fatiga y el dolor de cabeza fueron los síntomas informados con mayor frecuencia después de la tercera inyección.

La semana pasada, los CDC publicaron datos que enumeran los efectos secundarios más comunes que las personas informaron después de recibir refuerzos de las tres vacunas, el mismo día que la agencia amplió la elegibilidad de las vacunas de refuerzo de Moderna y Johnson & Johnson para millones de estadounidenses.

Los efectos secundarios más comunes informados después de recibir una tercera inyección de una vacuna de ARNm, del tipo fabricado por Moderna y Pfizer, fueron dolor en el lugar de la inyección, fatiga, dolor muscular, dolor de cabeza y fiebre, seguidos de escalofríos y náuseas, según los datos.

Los datos disponibles para J&J eran más limitados, pero las personas informaron fiebre, fatiga y dolor de cabeza después de recibir una segunda dosis de esa vacuna, según la agencia.

La información proporcionada se basó en envíos al sistema de mensajería de texto de los CDC v-safe y al Vaccine Adverse Event Reporting System, un programa nacional de vigilancia de la seguridad de las vacunas.

La Dra. Macaya Douoguih, jefa de desarrollo clínico y asuntos médicos de la división de vacunas de J&J, Janssen, dijo que no hay datos que sugieran que las personas corren un mayor riesgo de padecer un coágulo sanguíneo poco común pero grave después de recibir una segunda dosis.

La mayoría de las personas que recibieron una dosis adicional de cualquier vacuna eran mujeres blancas mayores de 50 años, según los datos de v-safe.

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