Un padre de West Hartford, Connecticut está acusado de causar la muerte de su hija recién nacida cuando la dejó caer el viernes, pero su abogado dijo que fue un terrible accidente.
Grant McAuslan, de 34 años, fue arrestado y acusado de homicidio involuntario y riesgo de lesiones a un menor. Su abogado dijo que lo que sucedió el viernes fue un accidente terriblemente trágico mientras se le daba biberón a la bebé a altas horas de la noche y que no justifica esos cargos.
Los documentos judiciales establecen que los médicos que vieron a la niña cuando falleció creen que sus heridas serían el resultado de un acto de abuso.
"Yo diría que la policía de West Hartford se apresuró a emitir un juicio al presentar estos cargos contra Grant sin hacer una investigación exhaustiva y completa", dijo William Paetzold, abogado de McAuslan.
Fuera del Tribunal Superior de Hartford el lunes, Paetzold se paró junto a la madre de la bebé y dijo que su cliente no debería ser acusado.
McAuslan compareció ante el tribunal el lunes. En documentos judiciales, los investigadores dijeron que McAuslan y su esposa les dijeron que la bebé se cayó cuando el padre trataba de cargarla de una cuna portátil que tenían en su habitación, y que llamaron al 911 de inmediato. La niña fue llevada al Centro Médico Infantil de Connecticut, donde su estado se deterioró rápidamente. Tenía múltiples fracturas de cráneo, varias hemorragias y evidencia de lesión cerebral e hinchazón.
Los médicos le dijeron a la policía que no creían que las lesiones fueran consistentes con una caída accidental desde una distancia corta.
Los documentos judiciales también dicen que mientras los investigadores se preparaban para salir del hospital, McAuslan se acercó a ellos y admitió que había agarrado al bebé de la cama con más fuerza de la que originalmente les había dicho, y se dio la vuelta mientras se giraba sosteniendo a la niña, provocando que se cayera más fuerte de lo supuesto.
"Grant es un padre, familia, esposo y hombre de familia cariñoso, y cálido. Nunca habría hecho algo así de manera intencional. Fue simplemente un accidente terrible", dijo Paetzold.
McAuslan es originario de Escocia y tiene doble ciudadanía. El estado argumentó que podría ser un riesgo potencial de fuga y la fianza se fijó en $ 750,000.
