Qué viene ahora para el polizón cubano tras quedar en libertad

Yunier García tuvo un emotivo reencuentro con su familia en Miami.

El polizón cubano que llegó a Miami escondido en el compartimiento de equipaje de un avión vivió ayer un día cargado de emociones y cargado de buenas noticias: recuperó su libertad, su reencontró con su familia y pudo hablar con sus padres y su pequeña hija en Cuba.

A Yunier García Duarte, de 26 años y quien trabajaba en el Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana, le fue concedido el asilo político después de que argumentó que de ser deportado a Cuba sería encarcelado y torturado.

"No sé ni cómo me siento. Todavía no me lo creo. Estoy muy feliz, hablé con mi mamá y también está muy feliz", dijo en sus primeras declaraciones a los medios de comunicaciones, poco después del emotivo reencuentro con su prima en el aeropuerto de Miami.

García dejó en Cuba a sus padres y su hija de 2 años, a quien espera poder traer a Estados Unidos. "Si Dios lo permite con mi niña, con mi familia", dijo al polizón al ser preguntado sobre cómo se ve en cinco años en este país. 

El joven cubano tiene planeado radicarse en Georgia, en donde vive su prima, trabajar y aprender inglés. 

En diálogo con Telemundo 51, dijo estar "alegre" y a la vez "nervioso" luego de recuperar su libertad. "No me esperaba que fuese tan rápido. En un momento me dijeron "vístete que te vas", no me pude despedir de muchos compañeros que están ahí", dijo García en una entrevista telefónica.

El joven cubano recuperó su libertad a pesar de que la Fiscalía apelará la decisión del juez de otorgarle asilo político, argumentando que debía ser deportado a Cuba para ser juzgado por el delito que cometió al subirse "ilegalmente" a un avión con destino a Miami.

El abogado Willy Allen, quien representó a García ante las autoridades migratorias de Estados Unidos, dijo que Yunier expuso su caso de forma "directa, fuerte y creíble" tras haber arriesgado su vida subiéndose y escondiéndose en un vuelo chárter que llegó al aeropuerto de Miami en la madrugada del 16 de agosto. 

El polizón cubano aseguró desde su llegada a Miami que de ser deportado a Cuba sería gravemente castigado. "Si me deportan me torturan. Les pido encarecidamente que valoren mi caso… vine aquí porque es un país de derechos humanos", dijo García Duarte en exclusiva a Telemundo 51 en una breve llamada telefónica desde el Centro de Detención Krome.

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