Decepción y más confusión causa el segundo debate

Los candidatos olvidan las propuestas y optan por acusaciones y ofensas.

Cara a cara los candidatos que encabezan las preferencias se enfrentaron, pero no para discutir sus propuestas, sino para usar la estrategia que de nuevo destacó en el debate.

Como un show lleno de ocurrencias, acusaciones, ataques y burlas fue calificado por los mexicanos el segundo encuentro de quienes aspiran a gobernarlos. 

José Ramírez vive en la fronteriza ciudad de Tijuana y no se perdió ni un solo detalle, por eso se sintió decepcionado al no encontrar las respuestas a sus dudas. 

"Nomás se la llevan peleando uno al otro, no dicen las cosas como son", expuso Ramírez.

Las primeras planas de los diarios mexicanos dieron cuenta de lo ocurrido, destacando los momentos en que el drama rebasó a la política. 

Ante el público convocado para interrogar a los cuatro aspirantes, ellos dejaron a un lado las ideas, dando la impresión -indica este experto- de que no están tomando en serio su papel. 

"Ganó en este segundo debate la ignorancia, la improvisación, la desconfianza, la incertidumbre", considera el analista Julio Jiménez.

Según diversas encuestas, el segundo debate benefició a Andrés Manuel López Obrador, quien se ubicó a unos 18 puntos por encima de Ricardo Anaya, dejando muy lejos a José Antonio Meade. 

Aunque por igual, los cuatro políticos festejaron su supuesto triunfo. 

"Yo les pregunto, quién mero ganó el debate... Yoooo!, sostuvo Meade, el candidato del oficialista PRI. 

En tanto, el electorado espera que en el próximo debate el único ganador sea México.

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