Lindsay Clancy, acusada de quitarle la vida a sus tres hijos, en Duxbury, Massachusetts, permanecerá hospitalizada bajo custodia policial, se determinó en una audiencia realizada este martes, donde se ofrecieron desgarradores detalles del día de los hechos.
Clancy escuchó los cargos este martes desde su cama de hospital por los asesinatos de sus tres hijos, ocurridos en Duxbury, Massachusetts, entre ellos, dos cargos de asesinato y tres de estrangulamiento.
Clancy, que no habló durante el proceso, pareció cerrar los ojos durante varios momentos cuando los fiscales alegaron que ella "creó" el escenario en el que su esposo, Patrick, se fue de su casa en Duxbury durante unos 20 minutos, dejándole suficiente tiempo para estrangular a Cora, 5, Dawson, 3, y Callan.
Clancy está acusada de atar una banda de ejercicio alrededor del cuello de cada uno de sus tres hijos durante varios minutos, luego cortarse y saltar por una ventana mientras su esposo estaba haciendo un par de mandados que ella había arreglado, todo después de ver cuánto tiempo estaría fuera de casa. el hogar.
“Ella planeó estos asesinatos, se dio el tiempo y la privacidad necesarios para cometer los asesinatos y luego estranguló a cada niño en el lugar donde deberían haberse sentido más seguros, en casa con su madre”, dijo la fiscalía en el Tribunal de Distrito de Plymouth.
El abogado de Clancy, al señalar que el intento de suicidio la dejó incapaz de caminar, dijo que lo que sucedió "claramente fue producto de una enfermedad mental" y pidió que la mantuvieran en un centro médico mientras se recupera.
"Esta no es una situación, su señoría, que fue planeada de ninguna manera", dijo el abogado.
El juez ordenó que Clancy permanezca en su hospital actual hasta que los médicos la autoricen a ir a un nuevo centro de rehabilitación, y una vez que se le permita ir al nuevo centro, que permanezca allí excepto para recibir atención médica.
Un juez le permitió hablar con un psicólogo forense antes de su próxima lectura de cargos por la muerte de los niños el mes pasado.
El juez accedió a la moción de la defensa en una audiencia en el Tribunal de Distrito de Plymouth la semana pasada, horas después de que el abogado de Clancy afirmara que una sobremedicación de medicamentos psiquiátricos recetados condujo a la ideación homicida y suicida, según lo informado por primera vez por The Boston Globe.
El abogado Kevin Reddington confirmó sus comentarios a nuestra cadena hermana NBC10 Boston el viernes por la mañana y los reiteró fuera de la corte, donde dijo que fueron entregados "uno encima del otro durante un período de tiempo tan prolongado, sin tener ningún efecto útil".
A Lindsay Clancy le recetaron un total de 12 medicamentos diferentes en los cuatro meses anteriores a los asesinatos, dijo su abogado, incluidas benzodiazepinas como lorazepam, varios antidepresivos y Ambien, un somnífero.
Según Reddington, el esposo de Lindsay, Patrick, salió de su casa en Duxbury el 24 de enero para ir a CVS y recoger comida. Llamó al 911 después de regresar a casa alrededor de las 6:00 p.m., dijo el abogado, y agregó que los profesionales médicos no le habían advertido que no dejara a su esposa sola con sus hijos.
Patrick Clancy había suplicado ayuda a los médicos la semana anterior, diciendo, según Reddington, "'La estás convirtiendo en un zombi'". Y era simplemente una existencia brutal la que estaban viviendo. Sus padres estaban al tanto de esto, estaban tratando de ayudar".
La Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Plymouth no hizo comentarios sobre las afirmaciones hechas por Reddington antes de la lectura de cargos de Clancy el martes, donde es probable que los fiscales expongan con mayor detalle lo que creen que sucedió.
Las autoridades no han comentado sobre un posible motivo en el caso o sobre el estado mental de Lindsay Clancy, pero fuentes dijeron a NBC10 Boston que vivía con depresión posparto.
El viernes se llevó a cabo un funeral para los niños Clancy.
