Los legisladores de Massachusetts volvieron al espinoso tema de la seguridad de MBTA el miércoles y, cuando dieron inicio a su última audiencia de supervisión, un importante demócrata se siente frustrado porque los investigadores federales "optaron por no ayudar" a su panel.
La segunda audiencia de supervisión de MBTA del Comité de Transporte se programó para presentar el testimonio de la presidenta de la Junta de MBTA, Betsy Taylor, los funcionarios del Departamento de Servicios Públicos y los trabajadores de primera línea. Pero como lo hicieron en la primera audiencia en julio, los representantes de la Administración Federal de Tránsito, que el 31 de agosto publicaron un informe final de 90 páginas sobre los problemas en el T, rechazaron una invitación para asistir.
La intervención federal de este año parece haber acelerado las mejoras de seguridad en la MBTA e instó a la Legislatura y a la administración de Baker a acelerar repentinamente cientos de millones de dólares en ayuda para ayudar a cambiar la agencia de tránsito en apuros.
Los federales dicen que MBTA priorizó los proyectos de capital a largo plazo sobre el mantenimiento de rutina. Sin embargo, la FTA se ha negado a testificar en la audiencia del miércoles, diciendo que el Departamento de Transporte restringe la participación de los empleados en los procedimientos legales.
Un legislador dijo que espera que la FTA requiera que el estado gaste miles de millones en la T. El gerente general de MBTA, Steve Poftak, le dijo a Telemundo Boston que la T necesita $1.5 a $2 mil millones cada año para modernizar el sistema. Poftak tampoco participará en la audiencia del miércoles.
"Tomo un enfoque constructivo para todas estas audiencias de supervisión", dijo Poftak. "Observaremos con gran interés. Nuestro presidente de la junta participará en la audiencia. La gerencia de MBTA no participará en esta audiencia".
El final del cierre de la Línea Naranja está a la vista y el gerente general de MBTA se siente optimista.
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"Estamos en una excelente posición para terminar con fuerza y a tiempo", dijo el gerente general de MBTA, Steve Poftak, desde la pista en Charlestown el martes, día 25 del cierre.
Dijo que el trabajo está hecho en un 82%, con nueve décimas partes del reemplazo de vías y la mayoría de las actualizaciones de señales en Oak Grove y Malden también completadas.
El cierre de 30 días de la MBTA está programado para finalizar temprano en la mañana del lunes 19 de septiembre, y el gerente general de la agencia, Steve Poftak, dijo la semana pasada que el trabajo, que entonces estaba terminado en dos tercios, estaba programado para terminar a tiempo. .
Estamos haciendo un buen progreso y, nuevamente, confiamos en que reabriremos la mañana del lunes 19”, dijo a los periodistas el viernes.
La MBTA suspendió el servicio de pasajeros a lo largo de la línea de metro de 11 millas el 19 de agosto para completar cinco años de reemplazo y mantenimiento de vías y señales, así como otros proyectos en 30 días. Cuando se reanude el servicio, la mayoría de los trenes de la Línea Naranja en los rieles consistirá en vagones nuevos, el doble de lo que la MBTA tenía en funcionamiento antes del cierre.
También habrá otras mejoras, incluida la iluminación mejorada en las estaciones y viajes más rápidos gracias a los rieles mejorados y los sistemas de señalización.
El gobernador de Massachusetts, Charlie Baker, también expresó optimismo la semana pasada de que la concurrida ruta se reabrirá a tiempo.
El final del proyecto también significará el final de las principales interrupciones en las calles de Boston, Somerville, Medford y Malden, donde decenas de autobuses de enlace han reemplazado a los trenes subterráneos. Para dar cabida a los autobuses grandes, se cerraron algunas calles en el centro de Boston y se reservaron muchos carriles y espacios de estacionamiento para que los autobuses los usen exclusivamente a lo largo de la ruta.
Antes del cierre, la Línea Naranja facilitaba unos 100,000 viajes por día, según la MBTA, trayendo viajeros al trabajo, estudiantes a la escuela y visitantes a muchas de las principales atracciones turísticas de Boston.
Algunos viajeros regulares de la Línea Naranja han dicho que sus viajes diarios al trabajo se duplicaron como resultado de los desvíos. El tráfico en las carreteras del área aumentó a medida que más personas regresaron a trabajar después del feriado del Día del Trabajo junto con los estudiantes que regresaron a clases.
Poftak dijo el jueves que, con el regreso de los estudiantes de las Escuelas Públicas de Boston, fue el día más ocupado que MBTA ha visto desde que comenzó el cierre.
