Los estudiantes de las Escuelas Públicas de Boston regresarán a las aulas la próxima semana y, antes de que suene la primera campana, el distrito tiene como objetivo disipar cualquier inquietud que los padres puedan tener.
La buena noticia es que el distrito cuenta casi con su personal completo: maestros, conductores de autobuses, monitores de autobuses y personal de cocina.
La dotación de personal fue algo con lo que el distrito tuvo problemas el año pasado.
En la reunión, la Superintendente Mary Skipper prometió a los padres que el trabajo del distrito este año escolar incluye priorizar y acelerar el rendimiento académico, fortalecer el acceso a apoyos socioemocionales en el aprendizaje, agilizar las operaciones, garantizar la seguridad de los estudiantes, desarrollar prácticas auténticas de participación familiar y comunitaria y mejorar las comunicaciones internas y externas con las familias y el personal.
Skipper dijo que la mayor prioridad, sin embargo, será seguir avanzando para reducir el ausentismo, trabajando con la comunidad escolar en general para eliminar cualquier barrera que impida que los niños asistan a clase todos los días.
"En BPS vimos una caída de alrededor del 5% en el ausentismo crónico y eso fue significativo dado que a nivel nacional las cifras realmente fueron en la dirección equivocada, aumentaron", dijo Skipper. "Este es realmente el arduo trabajo de nuestras familias trabajando junto con los supervisores. de asistencia, con nuestros enlaces familiares, con nuestros consejeros en las escuelas, nuestros maestros”.
El primer día de clases en Boston para los grados 1-12 es el 7 de septiembre.
Local
K0-K2 todos regresan el 11 de septiembre.
