El gobernador Charlie Baker hizo una súplica apasionada a los residentes de Massachusetts antes del fin de semana del Día de la Recordación, cuando se espera que salga el sol.
"Si vas a salir, sé inteligente. Ten cuidado, respeta el virus", dijo Baker el viernes por la tarde en Lawrence, donde el alcalde anunció un compromiso de $1 millón para evaluar a 1,000 residentes de la ciudad cada día.
Muchas personas suelen celebrar el Día de la Recordación en las playas, parques o comidas al aire libre con familiares y amigos, pero las reuniones se han convertido en formas de propagación del virus, incluso aquellas que piensan que están saludables.
Baker dijo que comprende el deseo de salir, pero instó a los que lo hacen a que continúen usando cubiertas para la cara y manteniendo la distancia social, "sus dos mejores aliados para prevenir la propagación" del virus.
Hizo hincapié en el éxito que ha tenido Massachusetts al aplanar la curva, y a un gran costo.
Hizo hincapié en el éxito que ha tenido Massachusetts al aplanar la curva, y a un gran costo.
"Necesitamos continuar haciendo el tipo de progreso que todos hicimos en la lucha contra este asunto en los últimos dos o tres meses", dijo Baker.
El alcalde de Lawrence, Daniel Rivera, se hizo eco de los comentarios de Baker sobre cuidar el fin de semana del Día de la Recordación.
Baker y Rivera estaban hablando desde el nuevo sitio de pruebas de manejo detrás del Everett Mill en Canal Street en el que la ciudad estaba invirtiendo.
Rivera también anunció que todos los eventos públicos se cancelarían hasta fin de año para evitar la propagación del virus. Dijo que la ciudad necesita las pruebas para ayudar a sus muchos trabajadores esenciales, y pagaría la iniciativa con sus reservas de efectivo, que se han acumulado durante varios años.
"Lawrence está tan preparado como cualquier comunidad puede estar para luchar en esta guerra y sanar después", dijo.
La ciudad es una de las comunidades más afectadas en Massachusetts, con 3,041 casos de coronavirus por cada 100,000 habitantes, la cuarta tasa más alta en el estado hasta el miércoles. Ciento nueve residentes de Lawrence han muerto, señaló Rivera.
