Un hombre de Massachusetts que pasó 34 años tras las rejas por un asesinato que, según él, no cometió, fue puesto en libertad mientras los tribunales determinan si debería recibir un nuevo juicio.
Thomas Rosa Jr., de 59 años, de Chelsea, fue liberado la semana pasada, dijeron sus abogados del New England Innocence Project y del Boston College Innocence Program en un comunicado el lunes.
Fue liberado por un solo juez de la Corte Judicial Suprema basándose en parte en la solidez de la evidencia de ADN obtenida después de su condena y la evidencia que socava las identificaciones de los testigos en su caso, dijeron los abogados.
Esa evidencia de ADN, "si es correcta, junto con las otras afirmaciones del acusado, bien podría establecer esa 'confluencia de factores' que indicarían que se requiere un nuevo juicio", escribió el juez Frank Gaziano en su decisión el miércoles pasado.
Rosa fue entregado por su cuenta a su familia con ciertas condiciones, entre ellas que no abandone el estado, dijeron sus abogados.
La Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Suffolk ayudó a asegurar la liberación de Rosa a través de una petición a Gaziano diciendo que la moción de alivio posterior a la condena tiene mérito, que no presenta ningún peligro para el público y que su edad y condiciones de salud subyacentes lo ponen en riesgo de muerte o lesiones graves si contrae COVID-19 en prisión.
El Tribunal Superior del estado está considerando actualmente su moción para un nuevo juicio. Se espera que los abogados de Rosa y los fiscales estatales presenten informes adicionales en los próximos meses y no hay un calendario para tomar una decisión.
Local
Rosa fue condenado por el asesinato en 1985 de Gwendolyn Taylor, una ayudante de enfermera de 18 años.
Fue juzgado tres veces. Un juicio terminó siendo nulo, y una condena fue anulada antes de ser condenado en 1993.
