NUEVA YORK — Las autoridades de salud de Estados Unidos comenzarán a examinar a los pasajeros de vuelos provenientes del centro de China para determinar si portan un nuevo virus que se ha propagado entre decenas de personas y que hasta ahora ha causado la muerte de dos de ellas, lo que causa preocupación sobre la posibilidad de una nueva epidemia internacional.
Las autoridades de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CFC por sus siglas en inglés) anunciaron este viernes que comenzarán a tomar las temperaturas y a preguntar sobre síntomas a los pasajeros que lleguen a tres aeropuertos de Estados Unidos y que viajen desde la ciudad de Wuhan, donde se produjo el brote.
Los funcionarios estiman que unos 5,000 pasajeros serán sometidos al proceso en las próximas semanas en el Aeropuerto Internacional JFK de la ciudad de Nueva York, el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles y el Aeropuerto Internacional de San Francisco. El primer vuelo directo se esperaba para este viernes por la noche en el JFK, y el siguiente para el sábado por la mañana en San Francisco.
Más de 40 casos del recientemente identificado coronavirus han sido confirmados en Asia, incluyendo ambas muertes, al menos una de ellas relacionada con una afección médica previa. Las autoridades han señalado que probablemente se propagó de animales a personas, pero no han podido descartar la posibilidad de que se contagie de persona a persona.
Hasta ahora, el riesgo para los estadounidenses se considera bajo, pero los CDC afirmaron que desean estar preparados y que están tomando precauciones, informó el médico Martin Cetron, funcionario de los CDC.
Siempre es posible que un virus pueda mutar para volverse más peligroso. También es probable que surjan más casos en todo el mundo, incluido al menos uno en algún momento en Estados Unidos, dijo otra funcionaria de los CDC, la doctora Nancy Messonnier.