La madre de un niño de 10 meses fue arrestada por homicidio involuntario después de que su bebé muriera al ingerir una combinación de drogas bajo su cuidado, según una orden de arresto obtenida por NBC Connecticut.
En la orden de arresto, la policía dijo que Alexandra Polino enfrenta cargos por la muerte de su bebé después de que la Oficina del Médico Forense Jefe determinó que una variedad de drogas dañinas se encontraban en el sistema del niño en el momento de su muerte.
El informe de toxicología reveló que el bebé tenía niveles preocupantes de fentanilo, cocaína y xilazina en su sistema. El médico forense jefe dictaminó que la muerte del niño fue un homicidio.
El departamento de policía fue llamado a Farren Avenue alrededor del mediodía del 28 de junio por un bebé que no respondía. Los oficiales que acudieron encontraron a un bebé que no respiraba. Según las autoridades, los esfuerzos por reanimarlo fueron infructuosos.
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El bebé fue llevado al hospital y poco tiempo después fue declarado muerto. La orden de arresto revela que estaba "frío al tacto" y que llevaba muerto un período de tiempo significativo.
Las autoridades declararon que Polino había consumido cocaína un día antes de dar a luz, y cuando se le pedía que completara un análisis de orina, a veces usaba la orina de su hijo de 4 años en lugar de la suya, según la orden.
En la orden, los funcionarios dijeron que Polino admitió haber usado drogas en el pasado, pero negó haberlas usado actualmente. Sin embargo, como parte de su investigación, los oficiales localizaron una variedad de drogas en su posesión y cerca del bebé el día de su muerte.
Polino tiene antecedentes de uso de otras drogas, incluidos opioides como metadona, heroína y más, dijo a las autoridades. En el informe de toxicología publicado después de la muerte del bebé, los funcionarios afirman que tampoco se encontraron en el organismo del niño ni fentanilo ni 4-ANPP, un precursor químico utilizado en la producción de fentanilo.
Según la orden, la persona que realizó la autopsia observó que "cualquier traza de cualquiera de estas sustancias podría causar la muerte" en un niño tan pequeño.
Polino fue objeto de algunas investigaciones del Departamento de Niños y Familias en los últimos años, pero apenas 20 días antes de la muerte de su bebé, el DCF había documentado que "no hay preocupaciones que justifiquen que el caso permanezca abierto en este momento", dice la orden.
El DCF presentó una moción para sacar a la hija del hogar y colocarla en el hogar de una persona que no es miembro de la familia.
En una visita de control reciente, el médico del bebé notó que era un "niño feliz y sano [que] estaba bien". Polino ya tenía seis órdenes de arresto y ahora enfrenta nuevos cargos.
La policía arrestó a Polino bajo cargos que incluyen homicidio involuntario y riesgo de lesiones. Se entregó pocos días después de que se firmara la orden de arresto. Ella pagó una fianza de $250,000 después de comparecer ante el tribunal el martes y tiene otra fecha de audiencia fijada para el 8 de noviembre.
