Con un aumento de casos y a solo unos días de las vacaciones, la demanda de pruebas de COVID-19 se está disparando en Connecticut. Se han detectado largas filas en todo el estado, mientras la gente espera para hacerse una prueba.
La cantidad de gente en una fila para hacerse la prueba de COVID en Groton fue abrumadora el martes.
"Quiero asegurarme de que estoy a salvo", dijo Margie Gookins, mientras esperaba para hacerse la prueba en Groton.
Gookins dijo que alguien de su familia había dado positivo por el virus. Después de no poder encontrar una prueba casera de COVID, decidió hacerse una prueba en persona antes de las vacaciones.
"De lo contrario, no vería a mi familia", dijo Gookins.
Las personas, tanto sintomáticas como asintomáticas, también esperaban en una larga fila en Meriden el martes por la mañana.
"Es importante que todos estemos atentos y, durante las vacaciones, asegurarnos de no contagiar al resto de nuestras familias", dijo Michael Kulungian, quien dijo que decidió hacerse la prueba porque no estaba sintiéndose bien.
En respuesta al aumento de la demanda, el gobernador Ned Lamont está implementando un plan para aumentar la capacidad de prueba en unos 400 sitios en el estado. Y varias ubicaciones patrocinadas por el estado están ampliando el horario, mientras se agregaron siete nuevos lugares.
Además, el requisito de que decenas de miles de trabajadores no vacunados se realicen la prueba está en pausa durante dos semanas.
"Solo para darles un poco más de flexibilidad y asegurarnos de que tengamos un poco más de capacidad para proporcionar pruebas en el futuro", dijo Lamont.
Para encontrar un sitio de pruebas de COVID cerca de usted, llame al 211 o visite este sitio web.
